Epistemología social

 Hasta hace algunos años, la epistemología ha tenido un fuerte enfoque individualista. Su trabajo ha consistido en evaluar las creencias de los individuos abstrayéndolos de su entorno social. Para los epistemólogos sociales esto ha generado una imagen distorsionada de la situación epistémica de los seres humanos, la cual está caracterizada en gran medida por sus relaciones con otras personas y con instituciones. En este sentido, la epistemología social busca nivelar nuevamente la balanza; no busca abandonar los problemas de la epistemología tradicional, sino abordar nuevos problemas que surgen cuando se toma en cuenta el papel que lo social juega en la formación de creencias en los individuos.

Actualmente existen tres ramas principales de la epistemología social, según la caracterización que hace Alvin Goldman. En primer lugar, una rama que busca evaluar la calidad de las creencias individuales cuando se usa evidencia social (por ejemplo, el testimonio). En segundo lugar, una rama que busca evaluar las creencias de los grupos sociales. Por último, una rama que busca evaluar las consecuencias de adoptar ciertas disposiciones institucionales o relaciones sistémicas en oposición a sus alternativas.

De la primera rama de la epistemología social surgen problemas como la justificación del testimonio, el desacuerdo razonable, incluso la naturaleza evidencial del silencio o la ausencia de evidencia como evidencia. La segunda rama ha sido profundamente cuestionada, pues supone que es posible postular la existencia de grupos con creencias en tanto grupo. La tercera rama pone especial énfasis en las propiedades epistémicas de ciertos sistemas o instituciones cuando éstas son relevantes para optar por un sistema o una institución en lugar de otros. Sobre la tercera rama cabe ahondar mucho más.

La epistemología social de la ciencia tiene como principal objetivo el desarrollo de modelos de actividad científica, los cuales deben tomar en cuenta los factores sociales externos e internos a los comunidades científicas. De igual manera se encarga de la implementación de métodos y programas de investigación que abarcan estrategias de construcción de modelos y control de experimentos. Las teorías de simulación y el análisis de la división de trabajo son claros ejemplos de métodos y programas de investigación que comprenden a las prácticas científicas como colectividades que se encuentran influenciados por factores sociales.